el precio de la “paz social”: CC.OO y UGT recibenquince millones de euros del gobierno.
Pese a que el panorama económico para los trabajadores resulta doloroso, con unas expectativas nada halagüeñas, los sindicatos mayoritarios siguen mirando para otro lado. Lejos de agitar a la clase obrera, de ponerse al frente de la lucha contra el sistema capitalista que expulsa a millones de personas de sus empleos, su trabajo consiste en ir a mirar a su cuenta bancaria si recibieron los millones para mantener a la pléyade de “liberados”, que no quieren ni oír hablar de cambios. La “paz social” tiene su precio, quince millones.
La crisis española está expulsando del mercado laboral a 6.000 personas diarias, las afiliaciones a la Seguridad Social se hunden desde hace meses y ya existen cuatro millones de parados. En este contexto lo normal sería que los sindicatos estuvieran en pie de guerra y se enfrentaran al Gobierno, reclamándole que adopte medidas y reformas de calado para evitar esta sangría laboral.
Pero en España, y con un gobierno del PSOE, los sindicatos prefieren mantener la paz social, tal como ha dejado entrever en varias ocasiones el nuevo secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo,. Según el sindicalista una huelga general "no sería oportuna".
Todo se comprende cuando se analiza la financiación sindical y empresarial. Según una resolución del Ministerio de Trabajo, CCOO y UGT recibieron 14,7 millones de euros de dinero de todos los contribuyentes en 2008. Una cantidad que, según el departamento que dirige Celestino Corbacho, corresponde a la “representatividad” de estos sindicatos en el tejido productivo nacional y las subvenciones por su función “consultiva”.
Así, CCOO recibió 6,44 millones para la realización de actividades sindicales y otros 1,02 millones por la citada actividad “consultiva”. Por su parte, el Gobierno le dio a UGT 6,09 millones de euros de dinero de los contribuyentes para su funcionamiento y otros 1,19 millones extra por la función de consulta. Por lo tanto, CCOO recibió 7,46 millones y UGT 7,28 millones.
El despilfarro de dinero público no se queda sólo en la actividad sindical. La Confederación de Organizaciones Empresariales Españolas (CEOE), es decir, la patronal, recibió una subvención de 2,15 millones de euros por su función “consultiva” con el Ministerio de Trabajo.