ÚLTIMOS RETOQUES/Ana Lorenzo.
Los pacientes del Centro Oncológico de Galicia daban ayer las últimas pinceladas a las piedras que servirán para señalizar el Camino Francés a su paso por el concello de Arzúa
PINTAR se pueden pintar muchas cosas, aunque a pocos se les ocurriría colorear piedras, que luego servirán para indicar el recorrido del Camino Francés hasta Santiago. Desde hace varias semanas, esto es lo que han hecho varias de las personas ingresadas en el Centro Oncológico de Galicia, que han superado su miedo a coger un pincel y han dibujado sus anhelos en las rocas. «Es muy curioso, pero todos quieren pintar su casa en las piedras, y es que muchos llevan más de dos meses ingresados», cuenta Aurora Santos, principal promotora de este proyecto, junto con varios integrantes de la Oficina de Cooperación y Voluntariado de la Universidad coruñesa.
Gracias a esta iniciativa, se ha conseguido que muchos pacientes se levanten de cama y salgan de sus habitaciones, y, aunque en el taller sólo participan siete personas, son muchos los pacientes del centro que se acercan cada viernes para ver la evolución de las obras. Hoy, estos originales trabajos pictóricos se trasladarán al tramo del Camino de Santiago que cruza Arzúa, donde también se instalará una caseta para que, todos aquellos peregrinos que lo deseen, puedan aportar su granito de arena, o más bien piedra, a este proyecto.
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